La disputa entre choferes, empresarios y el municipio de la capital dejó esta mañana las calles del microcentro desiertas de colectivos. La extensión, por tiempo indeterminado, del paro de colectivos afectó a más de 320.000 usuarios del transporte público de pasajeros, que a diario transitan por la zona metropolitana de San Miguel de Tucumán.
"Hasta que no saquen los colectivos no recibiré a los empresarios", advirtió CortalezziLos choferes del transporte público iniciaron el paro ayer a las 16, en reclamo por el pago de dos ítems salariales adeudados -fijados en la última paritaria-. César González, secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), exigió el pago de un incremento no remunerativo de noviembre de $ 3.200 y una suma no remunerativa $ 3.814.
La medida de fuerza será levantada a partir de las 13 y se espera que el servicio se normalice durante la tarde
Desde la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat) enviaron un nuevo pedido de aumento al Concejo, para llevar la tarifa de los $15,50 actuales hasta $ 28,50. Pese al pedido, el presidente del cuerpo, Armando Cortalezzi, insiste en que no tratarán la suba hasta marzo.
Después de 21 horas de protesta, los representantes de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat) y la Unión Tranviarios Automotor (UTA) informaron que desde las 13, las 14 líneas urbanas y 56 interurbanas y rurales funcionarán con normalidad en toda la provincia.
El conflicto se destrabó luego de que el Gobierno provincial le cediera $80 millones en subsidios a los empresarios, para garantizar el pago de la deuda que mantienen con los trabajadores.